Leishmaniosis canina

08-06-2011

La enfermedad se transmite a través de un mosquito, llamado flebotomo. De ahí que, si hay mosquitos, hay riesgo de contagio. La temporada de peligro comienza con el calor, normalmente en mayo y finaliza en septiembre u octubre si se prolonga el verano. Durante el invierno los mosquitos permanecen en estado de larvas cuaternarias y son inofensivas. En las zonas más cálidas de España encontramos mosquitos prácticamente todo el año y por consecuencia el peligro existe todo el año.

El primer síntoma clínico más habitual es la pérdida de pelo, sobre todo alrededor de los ojos, orejas y la nariz. Según la enfermedad va avanzando, el perro pierde peso aunque no pierde el apetito. Son habituales las heridas en la piel, especialmente en la cabeza y en las patas, en las áreas donde el perro está en contacto con el suelo al tumbarse o sentarse. Cuando el cuadro se vuelve crónico, este se complica observandose en muchos casos síntomas relacionados con insuficiencia renal.

Si tu perro no recibe protección alguna, el riesgo de contagio varia de un 3% a 18% según la zona. El riesgo siempre aumenta si su perro permanece en zonas más rurales y periurbanas, en regiones cálidas del país y si está fuera de casa al anochecer.
En el caso de que piense que tu perro padece de Leishmaniosis, visita a tu veterinario quien realizará una prueba analítica mediante una muestra de sangre de tu perro. Dependiendo de su estado, también tomará una muestra de la médula ósea o del tejido de un gánglio linfático inflamado para examinarla al microscopio y detectar los parásitos.

El período de incubación puede variar entre 3 meses y 18 meses. De forma excepcional, la enfermedad puede permanecer en latencia durante varios años. Algunos perros son resistentes y, aunque reciban picaduras de los flebotomos, nunca mostrarán síntomas de la enfermedad siempre y cuando estén correctamente alimentados y no estén sometidos a estrés. Esta resistencia, probablemente, está determinada genéticamente.

Actualmente el tratamiento para la leishmania no es caro y se obtienen excelentes resultados,permitiendo a tu perro llevar una vida normal y durante muchos años.

En algunos casos,sobre todo si se ha detectado a tiempo,han llegado a negativizar la enfermedad.